En el medio Reddit, un desarrollador de Microsoft ha manifestado, de manera anónima eso sí, ( éste ha visto el percal y pasa de quedarse sin curro por boca-chancla ) que Kinect para XboxOne cuesta practicamente lo mismo que la propia consola.
Por otra parte, y defendiendo este ejemplo de negocio sin parangón, este empleado del gigante americano ha defendido el uso del sensor de movimiento de la consola, argumentando que el sistema es parte integra de la experiencia que nos ofrecerá XboxOne, a parte de poner una herramienta con muchísimas posibilidades para los desarrolladores de juegos.
Sabemos que normalmente las compañías lanzan sus consolas al mercado a precios que no cubren el gasto de fabricación de sus consolas, con la expectativa de recuperar esa diferencia después con la venta de juegos y la posterior bajada del precio de los componentes del hardware. Lejos de esto, y con lo poco que ha convencido hasta ahora XboxOne, la decisión de meter Kinect con calzador con la consola, puede ser la pala con la que Microsoft comience a cavar su tumba. Recordar la maldición de la tercera consola que pronostico Kike…
Por último, en la entrevista, nuestro desconocido personaje también declaró que un colega trabajador de Sony se le acercó en el E3 y le dijo: » vosotros habéis ganado con los juegos, pero nosotros os hemos ganado con los jugadores».