Como colofón a su conferencia de esta tarde, Microsoft ha decidido tirar de cantera y apostar sobre seguro, revelando el primer gameplay de lo que quizá era una de las apuestas más seguras de esta feria. hablamos, como no, de la cuarta entrega de su saga de acción en tercera persona, un Gears 4 ( parece que el Of War se queda por el camino) que de manera un tanto incomprensible ha decidido basar su presentación en sociedad en una misión nocturna con menos luces que una planeadora de la guardia civil.
Resulta díficil opinar, claro, porque la visibilidad era más bien reducida y porque lo que hemos podido intuir sabía a bastante poco. Mecánicas continuistas, la consabida apuesta por el set piece desbocado y un apartado técnico que tampoco parece la revolución que se podía esperar de una saga que supuso la verdadera puesta de largo en lo técnico de la anterior generación. Veremos, si es que la próxima vez deciden dejarnos ver algo.