El deporte electrónico de bolsillo Clash Royale – Análisis

maxresdefault (1)Seguramente no habéis estado ajenos al nuevo boom en juegos de móvil, Clash Royale está en boca de todos. Este sucesor espiritual del popularísmo Clash of Clans, con el que comparte sprites y «bestiario» pero poco a nivel de concepto, se presenta como el perfecto hijo bastardo entre Hearthstone y un tower defense, sin olvidarse de recoger una importantísima vertiente competitiva que hace que compañías como la Liga de Videojuegos Profesional haya organizado un primer torneo de prueba. Los e-Sports portátiles ya están aquí.

Supercell, el estudio de videojuegos finlandés, que ya experimentara con la posibilidad de hacer equipos y derrotar a una IA u a otros jugadores de todo el mundo en títulos anteriores como el anteriormente mencionado Clash of Clans o Boom Beach se destapa definitivamente con una apuesta por los e-sports de móvil, como un estudio totalmente capaz de seguir el axioma de Blizzard: «Easy to play, hard to master»

Tanto tu como tu oponente tenéis 2 fuertes desde los que se lanzan flechas contra los enemigos que vengan y un castillo, donde un rey se mancha las manos y dispara con un cañón. El objetivo es destruir más estructuras que tu rival «invocando» unidades que las atacarán pero, y aquí viene la similitud con Hearthstone, disponemos de una barra con «Elixir» que cumple las veces de maná, el cual podremos canjear por soldados a nuestro gusto, los cuales tienen distintas habilidades y cualidades y, lo que es más interesante, distinto coste.screen322x572

Cosa importante que aún no he mencionado es que toda esta acción se desarrolla en tiempo real para los dos jugadores, lo que le imprime un carácter de acción-reacción que define todo el juego. Existe la posibilidad de realizar tácticas y buscar sinergias entre las unidades, que se muestran como cartas, antes de las partidas, pero como no podemos conocer la «alineación» que usará nuestro contrincante, hace que la velocidad de despliegue y conocimento de todas los naipes sean fundamentales.

Supercell ha comentado recientemente que había descartado unos 13 prototipos antes de sacar a las stores Clash Royale, y se nota. La diversidad de estrategias y situaciones hace que no sea fácil ni aburrirse ni frustarse, y que la «suerte» cada vez que abrimos un cofre y obtenemos nuevas cartas no sea definitoria; la habilidad cuenta y mucho.

¿Pero si el juego es gratis, de donde se gana dinero? Pues como es común en el terreno móvil, con micropagos. Cada vez que ganamos una partida se nos da un cofre aleatorio que tendremos que esperar cierto número de horas para abrirlo o pagar para abrirlo instantáneamente; de igual manera se pueden comprar cofres bastante jugosos que se abren en el momento. Esto puede echar para atrás pero el ratio de cartas obtenidas no difiere mucho de la apuesta de Blizzard, en la que con suerte abrimos un sobre al día jugando; aunque si he de hacer notar, que las cartas legendarias y épicas decantan un poco más la balanza que en el Hearthstone.

En una entrevista concedida a Moesport, el número uno (y dos con una cuenta secundaria) del juego expone que Clash Royale peca de simple cuando se le expone a cierta exigencia y que en 3 minutos por partida no hay opción a demostrar mucha habilidad. Comparto esta impresión aunque el equipo de desarrollo ha dicho que próximamente añadirán nuevas cartas y realizarán balanceos a las cartas que estén más rotas, lo cual puede darle cierta vida extra al juego.

Con todo esto, estamos delante de una muy buena apuesta para abrir los móviles a los e-Sports y que seguirá creciendo. Supercell ha sabido coger lo bueno de los juegos de este tipo que están triunfando y crear un fenómeno viral que atrae al mismo público que se interesa por los «e-Sports de sobremesa»

Acerca de razablan

E-sports y más. Reflexiones desde la experiencia y la inexperiencia.

Check Also

Chinos chinados. Antihype 7×27: Total War: Three Kingdoms

¡Buenas, amigos y amigas de las ondas y los bits! Bienvenidos y bienvenidas a Antihype, ...

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.